Por Mario Castro Gutierrez.

Socio Colombia – Xtrategia Group

La adopción de nuevas tecnologías está cambiando la manera en que se prestan los servicios legales. Esta evolución y revolución tecnológica promete mejorar la eficiencia tanto estratégica como operativa, reducir costos y ofrecer servicios más accesibles a los clientes. Sin embargo, también plantea desafíos y cuestiones jurídicas que deben abordarse para garantizar la protección de derechos, administración y gestión de riesgos y de cumplimiento normativo. Esto puede generar beneficios en cuando a:

1. Eficiencia y reducción de costos: La automatización de procesos y tareas, por ejemplo, implica reducción de costos y mayor eficiencia en la ejecución de tareas repetitivas y administrativas, como la gestión de documentos y contratos y la implementación de herramientas de IA, que pueden analizar grandes volúmenes de datos en poco tiempo.
2. Accesibilidad y disponibilidad: Las plataformas digitales permiten a los abogados y a los clientes acceder a los servicios legales desde cualquier lugar y en cualquier momento. Esto no solo facilita la consulta y la resolución de problemas legales, sino que también amplía el alcance de los servicios legales a una audiencia global.
3. Análisis predictivo: Las herramientas de IA pueden analizar grandes volúmenes de datos para predecir resultados legales y ofrecer recomendaciones basadas en patrones históricos. Esto puede mejorar la toma de decisiones y permitir a los abogados anticipar posibles problemas y estrategias.
4. Asesoramiento legal personalizado: Los chatbots y asistentes virtuales impulsados por IA pueden proporcionar asesoramiento legal básico y responder a preguntas frecuentes, ofreciendo a los clientes un acceso más rápido a la información y reduciendo la carga de trabajo de los abogados.
5. Optimización del proceso de litigio: La IA puede ayudar a identificar los argumentos más fuertes en un caso, predecir la probabilidad de éxito y optimizar la estrategia legal en función de los datos disponibles.
6. Marketing legal: Las estrategias de marketing digital permiten a las firmas legales posicionarse en el mercado de manera más efectiva. El uso de SEO (optimización para motores de búsqueda), marketing en redes sociales y análisis de datos permite a los abogados llegar a sus clientes potenciales de manera más eficiente y personalizada.

No obstante, si bien la innovación legal y la adopción de las nuevas tecnologías en el ejercicio de las actividades jurídicas reporta entre otros, los beneficios antes mencionados, resulta igualmente importante que, al momento de elegir su adopción e implementación, se adopten medidas orientadas,  cuando menos a mitigar los efectos negativos de los riesgos que ya se han identificado a nivel global, dentro de las cuales destacamos las siguientes:

1. Protección de datos personales: La recopilación y el almacenamiento de datos personales en plataformas digitales deben cumplir con las normativas de protección de datos correspondientes. Las firmas legales y las áreas legales de las empresas deben implementar medidas de seguridad adecuadas para proteger la información sensible y garantizar la protección de datos personales.
2. Derechos de autor y Propiedad Intelectual: El uso de herramientas digitales y contenido generado por IA puede plantear cuestiones sobre derechos de autor y propiedad intelectual. Es importante establecer claramente la titularidad de los derechos sobre los documentos generados digitalmente y asegurarse de que el uso de software y contenido cumpla con las licencias y normativas vigentes.
3. Cumplimiento de normativas: La adopción de nuevas tecnologías debe realizarse en conformidad con las leyes locales e internacionales aplicables. Todos los operadores jurídicos, independientemente de la forma en que presten sus servicios legales (como litigantes, consultores, abogados in house, jueces, entre otros) deben estar al tanto de las regulaciones que afectan la práctica legal digital, incluyendo el uso de IA, la automatización de procesos y la gestión de datos, así como de las normas de protección de datos personales, PI, derechos de autor, protección al consumidor, libre competencia, etc., ya que su utilización puede tener incidencia e incluso materializar responsabilidad en cualquiera de dichos campos del derecho.
4. Transparencia y consentimiento: Al implementar tecnologías que recopilan y procesan datos, es crucial obtener el consentimiento informado de los clientes. La transparencia sobre cómo se utilizan los datos y los fines para los cuales se recopilan es fundamental para mantener la confianza y cumplir con las normativas de protección de datos.
5. Responsabilidad: La utilización de IA plantea preguntas sobre la responsabilidad en caso de errores o resultados imprevistos. Las firmas legales deben establecer claramente la responsabilidad en el uso de tecnologías basadas en IA y asegurarse de que existan mecanismos para manejar posibles fallos o malentendidos.
6. Ética y regulación: La integración de IA en la práctica legal debe realizarse de manera ética y en conformidad con las regulaciones profesionales. Las firmas deben desarrollar políticas y procedimientos para garantizar el uso ético de la IA y cumplir con las normas establecidas por los organismos reguladores.

En conclusión, la transformación digital en el sector legal ofrece numerosas ventajas en términos de eficiencia, accesibilidad y marketing. Sin embargo, es esencial abordar las cuestiones jurídicas relacionadas con la protección de datos, los derechos de autor y el cumplimiento normativo para asegurar una adopción segura y efectiva de estas tecnologías. Las firmas legales y las empresas deben estar preparadas para adaptarse a los cambios y gestionar los riesgos asociados con la digitalización de la práctica legal.