Mejores individuos forman mejores organizaciones, máxime después de una fusión.
Hemos visto en los últimos meses cómo estudios de abogados se han fusionado o se han asociado a grandes firmas internacionales. El movimiento es claro y es una tendencia, pero antes de plantearse cualquiera de esas acciones hay que hacer un gran análisis, y ser consciente de que las conclusiones obtenidas desde la honestidad y humildad nos ayudarán a tomar una decisión apropiada.