El primer paso para implementar una estrategia de Legal Ops exitosa es realizar un diagnóstico inicial exhaustivo que permita identificar las áreas de mejora y los desafíos específicos del departamento legal. En esta fase, se evalúan diferentes aspectos clave como los procesos de reclutamiento, los planes de carrera, los costos, los recursos y la relación con los stakeholders del negocio. A través de entrevistas y análisis, es posible detectar cuellos de botella y oportunidades de optimización que afectan la eficiencia del equipo legal. El resultado de este diagnóstico es un informe detallado con recomendaciones prácticas que sirven de base para la elaboración de estrategias de mejora.

Implementar un diagnóstico preciso ofrece un entendimiento claro de los problemas y retos que enfrenta el departamento legal, lo que facilita la toma de decisiones informadas para la mejora de procesos y el alineamiento con los objetivos de negocio. Esta etapa es crucial para la adopción de cambios estratégicos que generen una mayor eficiencia, menor costo y una mejor integración de las funciones legales dentro de la empresa.